sábado, junio 26, 2010

María Rosario nos escribe...

Queridas hermanas de la Fraternidad de Pampa Silva:

En primer lugar agradecerles el escrito que enviaron a PARTICIPACIÓN en el cual las he sentido más cercanas y las sigo sintiendo, pienso que han sido años de gracia y regalo del Señor en las que nos ha permitido disfrutar y gozar ese espíritu de Madre Francisca que nos dejó en su legado la “Vida Fraterna”.

Vivir como hermanas en la vida contemplativa, en la oración comunitaria, en los detalles, en la confianza, libertad, todo eso que nos hace vivir en familia y todo esto lo digo porque he tenido la suerte de poderlo experimentar.

Ha sido una ayuda mutua la que he sentido, cada una con los dones que el Señor nos ha regalo y también nos ha ayudado a crecer y madurar nuestras debilidades, nuestros fallos.

También les digo hermanas; Rosa, Roxana y Vanesa, GRACIAS a cada una, en particular por vuestro apoyo, cercanía, confianza; sigamos viviendo estos valores de fraternidad e ir creciendo cada día en esa vida de contemplación y oración buscando tiempos libres para ello. He aprendido mucho de Uds.

Esta pequeña Fraternidad está dentro de la gran Fraternidad “Santa Rosa de Lima” como no dar GRACIAS por su acogida, cariño, cercanía y de tanto detalle que una no puede ir enumerando pero todas sabemos lo que damos y lo que recibimos, seamos agradecidas con Dios y con las hermanas y hermanos. Les envío este agradecimiento a todas las FRATERNIDADES de SANTA ROSA DE LIMA.

Con cariño y siempre unidas en la oración.

Hna. Mª Rosario Andrés

Burgos,23 de Junio 2010

jueves, junio 10, 2010

Gracias Mª Rosario!!

Ante el viaje de María Rosario para España, de retorno a su Provincia, como fraternidad pequeña, queremos compartir con todas las Hnas. de la Provincia Santa Rosa y de la Congregación nuestro agradecimiento a ella, por su convivencia en la fraternidad desde el 2005 hasta hoy. Y lo vamos a manifestar con una oración que se la dijimos a ella, un día antes de salir de casa:

Gracias por tu trabajo sencillo, silencioso en nuestra fraternidad, pero importante, porque nos ha dado al resto, el soporte para poder salir y llegar a una casa – hogar.

Gracias por haber acompañado muy de cerca a las jóvenes que han pasado por nuestra comunidad, en su experiencia del noviciado: Edith, Gloria, Vilma, Diana y Vanessa.

Gracias porque te has sentido comprometida con personas concretas de nuestro pueblo y que quizás algunos, no han sabido corresponder al bien recibido.

Gracias por haber sido presencia acogedora para los voluntarios que han pasado por nuestra comunidad.

Gracias por la vida compartida en el día a día, en la fe, en la fiesta, en la aventura, en lo difícil, en el juego, en el sembrar y cosechar, en el beber y el comer.


Con cariño y gratitud tus Hnas. De la comunidad de Pampa Silva:
Vanessa, Roxana y Rosa.